La Iglesia Católica Apostólica Peruana y Sociedad (IBC), que se enmarca en la familia de las Iglesias Católicas y Nacionales, se erige como una institución de carácter permanente y de profunda relevancia en el ámbito eclesiástico. Fundamentalmente, es la congregación de obispos que, actuando de manera unificada y coordinada (Internationalen Bischofs Conclave - IBC), ejercen una serie de funciones pastorales esenciales para el bienestar espiritual de los fieles.
El propósito central de esta asamblea episcopal es promover, en total conformidad con la normativa del derecho canónico, el mayor bien posible que la Iglesia puede ofrecer a la humanidad. Este noble objetivo se materializa principalmente a través de la implementación de diversas formas y modos de apostolado, siempre adaptando sus métodos a las circunstancias únicas y cambiantes de cada tiempo y lugar. 

Fundamento Canónico, Sucesión Apostólica y Validez Sacramental

Arzobispo Jesús Gutierrez es consagrado por Obispos de Sucesión Apostolica de The Old Catholic Church Of BC
Arzobispo Jesús Gutierrez es consagrado por Obispos de Sucesión Apostolica de The Old Catholic Church Of BC

La Iglesia Católica Apostólica Peruana y la Sociedad IBC basan su legitimidad en la Sucesión Apostólica, considerada válida por provenir de la Old Catholic Church of BC con origen episcopal en el Arzobispo Gerard Gul en 1892. Esta línea es reconocida históricamente por la propia Iglesia Católica Romana, la Antigua Iglesia Católica de Utrecht y la Iglesia Católica Ortodoxa. De esta sucesión surge la consagración de Monseñor Jesús Gabriel Gutiérrez, Arzobispo Presidente de la Iglesia. Este fundamento teológico y canónico sitúa a la ICAP como una "Iglesia Católica hermana" conforme al Canon 1012. El Concilio Vaticano II (Unitatis Redintegratio y Lumen Gentium) reconoce que los elementos de santificación y verdad subsisten fuera de la estructura visible de la Iglesia Católica, permitiendo el reconocimiento mutuo de los sacramentos como base para la restauración de la plena unidad cristiana.

Diálogo Ecuménico y Reconocimiento Eclesial

el 23 de septiembre de 2025, en la sede de la Arquidiócesis en Saint Paul, Minnesota, con la participación del Arzobispo Bernard Hebda, el Obispo Auxiliar Kevin Kenney (Iglesia Católica Romana), y el Arzobispo Jesús Gabriel Gutiérrez (ICAP & IBC).
el 23 de septiembre de 2025, en la sede de la Arquidiócesis en Saint Paul, Minnesota, con la participación del Arzobispo Bernard Hebda, el Obispo Auxiliar Kevin Kenney (Iglesia Católica Romana), y el Arzobispo Jesús Gabriel Gutiérrez (ICAP & IBC).

Un precedente formal que subraya el estatus eclesial de La Iglesia Católica Apostólica Peruana  es el Diálogo Ecuménico establecido con la Arquidiócesis de Saint Paul y Minneapolis (representante de la Iglesia Católica Romana) en los Estados Unidos.  En su misiva del 30 de julio de 2025, la Arquidiócesis afirmó explícitamente:

"Podemos entrar en DIÁLOGO ECUMÉNICO", confirmando el trato y, por ende, la validez sacramental y ministerial de Monseñor Jesús Gabriel Gutiérrez como Arzobispo Presidente. No obstante, señalaron que la ICAP "no está en comunión completo" 

Misión Pastoral

Arzobispo Católico Ortodoxo Sirio Crisóstomo  / Obispo Jesus Gutierrez / Arzobispo Víctor Manuel Fernández Prefecto del Dicasterio por la Doctrina de la Fe
Arzobispo Católico Ortodoxo Sirio Crisóstomo / Obispo Jesus Gutierrez / Arzobispo Víctor Manuel Fernández Prefecto del Dicasterio por la Doctrina de la Fe

Nuestra misión se centra en un llamado activo a todos los fieles para que se involucren directamente en la evangelización. Esta labor pastoral está arraigada en el principio fundamental de que la experiencia de Dios es tanto el inicio como el objetivo final de nuestra misión. La esencia de este trabajo evangelizador se fundamenta en la centralidad de Cristo y en la primacía de la Palabra de Dios. Un ejemplo palpable y exitoso de cómo llevamos a cabo esta misión es la iniciativa conocida como "Operación Contacto". Este proyecto, que comenzó en 2011 bajo la gestión de Monseñor Jesús Gutiérrez , se basa en la evangelización puerta a puerta. A través de este método, nuestros misioneros establecen un contacto personal y directo, compartiendo la fe y ofreciendo apoyo espiritual. Gracias a este esfuerzo constante, se han movilizado a más de cincuenta misioneros dedicados, demostrando un compromiso inquebrantable con la proximidad y la cercanía pastoral, y fortaleciendo el tejido de la comunidad.